Un arma de dos filos, una dualidad en la interpretación de las emociones más profundas como motor de la inspiración artística y la importancia de saber vulnerarnos sin perdernos en el intento.

Un arma de dos filos, una dualidad en la interpretación de las emociones más profundas como motor de la inspiración artística y la importancia de saber vulnerarnos sin perdernos en el intento.